La UNIAG se convierte en UNIAV.
LA VISION DE FUTURO DE LOS DOMINICOS CON LA UNIAV.

Fray Oscar Valderrama-vicerector.
Después de muchos años manteniendo una visión de futuro, en un caminar hacia un sueño que tomó forma y realidad con la Escuela Internacional de Agricultura y Ganadería y después, llegado el momento, elevar el sueño con el esfuerzo de frailes y laicos a Universidad Internacional de Agricultura y Ganadería, nos encontramos un nuevo reto histórico.
El obispo Valdivieso tenía que decidir si leer los signos de los tiempos y escuchar el grito de los indígenas por construir un futuro mejor, o mantener las estructuras ya existentes. En esta encrucijada, opta por una sociedad nueva, un mejor mañana que hiciera de esta tierra y de este pueblo una nueva Nicaragua para todos, aunque el resultado para él fuese el martirio.
Tenemos una cita con el futuro, teniendo como fortaleza, una historia que nos ha permitido llegar a este momento. Todos, hemos aportado para que podamos abrirnos a un nuevo paradigma educativo, con nuevos ofrecimientos profesionales y formativos que fortalezcan la universidad.
La riqueza del prestigio que tienen nuestra institución y sus egresados, conforman los pilares para que las nuevas propuestas académicas, sean aceptadas, con la seguridad de que sigue siendo abalada por un cuerpo docente y administrativo de calidad.
Solo el que se arriesga alcanza las metas. Nicaragua y en especial Rivas y toda esta área, necesita que esta institución universitaria de pasos para responder a las nuevas demandas que se avecinan como construcción del canal, el crecimiento económico y la de una mejor calidad de vida para todos.
La Orden (de predicadores) ha respondido en sus distintos momentos y hoy, no podemos dar la espalda a los jóvenes que desean forjarse un futuro. Así lo hizo monseñor Valdivieso, quien no dio la espalda a su momento histórico, ni los frailes que fundaron la Escuela lo hicieron apoyados de hombres y mujeres que creían. Hoy queremos que juntos, ustedes y nosotros, aportemos con una respuesta novedosa y de calidad.
El obispo Valdivieso creyó que podía ser distinta la vida de los indígenas y para eso trabajó y dedicó su vida. Nosotros al igual que él, hemos dedicado nuestras vidas a formar hombres y mujeres que logren un futuro distinto y puedan, a la vez tener una calidad de vida como profesionales y den un aporte para una Nicaragua mejor.
Les invito a que con el mismo orgullo que nos hemos sentido EIAG y después UNIAG, hoy iniciemos el camino para sentirnos el orgulloso de ser Universidad Internacional Antonio de Valdivieso (UNIAV), que al igual que las anteriores, somos parte de su construcción.